Incluso antes de nacer, nuestras mentes jóvenes comienzan a percibir el sonido, la música y el lenguaje. Así es como nos presentamos por primera vez al mundo del lenguaje. El aprendizaje de la lengua es algo hermoso, pero por mucho tiempo así no se veía. Poder hablar más de dos idiomas fue menospreciado y desanimado. Pero las actitudes sobre el bilingüismo han cambiado significativamente en los últimos cincuenta años. Antes en los Estados Unidos, siendo bilingüe estaba mal visto y la mayoría de las veces, castigaban a los estudiantes que hablaban un idioma diferente al idioma hablado en los salones y no enseñaban otras idiomas como el español (Fránquiz & Jiménez-Castellos, 2018; Hewings-Martin, 2017). Pero han terminado los días de cuando la segunda lengua estaba mal vista, etiquetada como confusa para los niños y supuestamente un freno en su desarrollo. Ahora en este nuevo siglo de avance y globalización, más gente adulta quiere que sus hijos puedan ser bilingües.
Para tener un mejor entendimiento de cómo empezamos a aprender otra lengua, tenemos que comprender lo que es la lingüística aplicada. Esto se refiere a la aplicación de conocimientos de la lengua y de los resultados de los estudios de la adquisición de lenguas a la enseñanza (Koike & Klee, 2013). Igualmente, tenemos que saber lo que significa el bilingüismo. El bilingüismo, o la adquisición de dos lenguas, significa que uno tiene la habilidad para poder expresarse en los dos idiomas. Si los idiomas se adquieren simultáneamente, lo que es muy común en los niños jóvenes, entonces el hablante tiene una habilidad nativa en los dos (Denham & Lobeck, 2013).
Aunque la mayoría de la población mundial es bilingüe (Denham & Lobeck, 2013), hay muchos conceptos erróneos de lo que significa ser un hablante nativo de más de una lengua. Una de las razones de por qué el bilingüismo en sí es difícil de definir es que el dominio de los idiomas hablados puede depender, por ejemplo, de las oportunidades de uso, las actitudes culturales hacia el bilingüismo en la escuela y en la sociedad, el estado de desarrollo de cada idioma, etc. (Denham & Lobeck, 2013).
Como resultado de la complejidad de incluso definir lo que significa ser bilingüe, muchos mitos rodean ese fenómeno lingüístico. Con frecuencia, estos conceptos erróneos sobre el bilingüismo están relacionados con las actitudes sociales sobre los hablantes bilingües mismos y con las actitudes sobre la inmigración y las poblaciones inmigrantes (Denham & Lobeck, 2013). Por decir, la mayoría de las personas en los Estados Unidos no son bilingües, aunque la mayor parte de los seres humanos lo son (Denham & Lobeck, 2013; Zentella, 1998).
Algo que hay que saber es que criar a niños bilingües no es fácil, en parte por estos mitos asociados con el bilingüismo. Por ejemplo, un mito que existe es que dicen que cuando los niños aprenden dos idiomas al mismo tiempo, los niños se retrasan en su aprendizaje, pero no es verdad. Aunque sí puede pasar que un bilingüe se atrase antes de un monolingüe en su desarrollo de lengua, no es la verdad que sufren deficiencias cognitivas (ASHA, n.d.; Hewings-Martin, 2017). Por lo tanto, una de las razones por las que los papás no enseñan a sus niños la lengua nativa es porque piensan que van a confundir los dos idiomas. La verdad es que no hay evidencia que mezclar los dos idiomas vaya a confundir a los niños o vaya a prevenir que aprendan los dos bien (ASHA, n.d.; Hewings-Martin, 2017; Zentella, 1998).
Además, el poder hablar y contar un cuento en los dos idiomas demuestra el dominio de esos idiomas. Los bilingües en todo el mundo a veces mezclan los idiomas. Los lingüistas llaman a este fenómeno “cambio de códigos”, mientras que, en la cultura popular de los Estados Unidos, a la mezcla del inglés y el español se le dice “Spanglish”. Muchos lo critican injustamente. La verdad es que los bilingües jóvenes se acostumbran a hablar el inglés con gente que domina ese idioma, y el español con los que prefieren el español, y a mezclar ambos muchas veces en situaciones informales con interlocutores que se sabe que van a entender. “Porque mira, you go out, y todo el mundo lo sabe” (Zentella, 1998, p. 8). Esta mezcla es completamente normal (Byers-Heinlein & Lew-Williams, 2013; Hewings-Martin, 2017; Zentella, 1998).
Sabiendo eso, ¿cómo podemos enseñar a los niños a que sean bilingües? Hay varias respuestas para esta pregunta, y no existe una fórmula perfecta que se ajuste a cada individuo. Una manera posible de hacerlo es que escuchen ambos idiomas desde el nacimiento. Por ejemplo, uno de los padres usa un idioma mientras que el otro padre usa el otro idioma. Otra manera de hacerlo es establecer cómo, cuándo y dónde se van a usar las lenguas. Por ejemplo, el uso de un idioma solo se permite en el hogar, y después el niño puede aprender su segundo idioma al comenzar la escuela. Es necesario que los padres provean tantas oportunidades como sea posible para que el niño pueda escuchar y practicar ambos idiomas en su vida diaria (ASHA, n.d.).
Hay muchas otras técnicas que dicen los investigadores que se pueden usar para ayudar al niño convertirse en bilingüe. Leer libros en ambos idiomas ayuda que el niño se haga proficiente en lectura. Escuchar música en ambos idiomas también ayuda para que el niño pueda hablar los idiomas bien, incluyendo cantando las canciones. También existen programas infantiles en muchos idiomas que pueden ayudar, en que les enseñan a los niños los números, las letras, los colores y el vocabulario básico. Además, los niños también pueden aprender a ser bilingües en campamentos de idiomas o en programas de educación bilingüe. Esto puede darles a los niños la oportunidad de hablar con otros niños y así practicar en situaciones informales con muchos interlocutores pares para hacerse más proficientes en los dos idiomas (ASHA, n.d.).
Otra pregunta que muchos padres tienen cuando ellos quieren que sus niños sean bilingües es: ¿qué debo de esperar cuando mi hijo aprende más de un idioma? Algo muy importante de saber es que cada niño es especial y diferente en su manera en el desarrollo del aprendizaje de una lengua. Como ya se ha mencionado, el aprendizaje de dos idiomas se tarda un poco más que cuando un niño aprende un solo idioma. Sin embargo, como los niños que aprenden solo un idioma, la mayoría de los niños, incluyendo a los niños bilingües, no tiene problemas para decir sus primeras palabras cuando cumple su primer año. Usualmente estas son expresiones como “mamá” o “papá”. Cuando los niños cumplen dos años, la mayoría de los niños, tanto bilingües como monolingües, ya puede usar frases y expresiones de más de una palabra, como, por ejemplo, “mi muñeca” o “más jugo” (ASHA, n.d.).
Algo más que también puede pasar es que cuando se introduce el segundo idioma, es posible que los niños no hablen mucho por un tiempo. Esto se llama “el período de silencio” (ASHA, n.d., párr. 12). Durante este periodo, el niño no habla tanto, aunque entiende. Este silencio puede durar desde unos meses hasta un año. No debe preocuparles a los padres, ya que es completamente normal (ASHA, n.d.).
Se recomienda en el sitio de la American Speech-Language-Hearing Association (n.d.) que es mejor no usar ambos idiomas en la misma oración cuando los niños estén aprendido, como el ejemplo citado arriba sobre el Spanglish. El uso de más de un idioma en una oración puede hacer que le sea más difícil al niño distinguir entre los idiomas (ASHA, n.d.). Pero esto no es el caso para todos los niños. Hay que recordar que muchos de los padres de estos niños bilingües son también bilingües, y, por lo tanto, este cambios de códigos es común entre ellos mismos. Algunos estudios sugieren que los niños bilingües hasta de viente meses pueden entender oraciones con el cambio de códigos y demostrar entendimientos de forma similar a la de sus padres (Byers-Heinlein & Lew-Williams, 2013). Lo que es más, cambiar de códigos puede cumplir una función social importante en la comunidad en que viven esos niños (Byers-Heinlein & Lew-Williams, 2013). Hasta admite la American Speech-Language-Hearing Association (n.d., párr. 8) que los niños bilingües por el mundo entero desarrollan su destreza de lenguaje del mismo modo que hacen los niños que aprenden no más de una lengua.
Considerándolo todo, enseñar a niños a que sean bilingües no es difícil, pero tiene que haber mucha persistencia y paciencia con ellos y con el proceso. Aunque sea por hablar a los niños en los dos idiomas, por un padre hablando en una lengua y el otro en la otra lengua o por medio de un campamento o programa bilingüe, un niño sí puede llegar a dominar ambos idiomas. En años pasados, había mucho estigma en contra de que los niños fueran bilingües. Pero con la globalización y una nueva actitud en el aprendizaje de más idiomas, muchos niños más, en este país y por todo el mundo, sí pueden ser bilingües.
Referencias
American Speech-Language-Hearing Association. (n.d.). El niño y el bilingüismo. https://www.asha.org/public/speech/spanish/el-nino-y-el-bilinguismo/
Byers-Heinlein, K., & Lew-Williams, C. (2013). Bilingualism in the early years: What the science says. LEARNing landscapes, 7(1), 95-112. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6168212/
Denham, K., & Lobeck, A. (2013). Linguistics for everyone: An introduction (2nd edition). Wadsworth.
Fránquiz, M. E., & Jiménez-Castellanos, O. (2018). Coeditors’ introduction: Revisiting 50 years of challenges and possibilities. Bilingual Research Journal, 41(4), 313-317. https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/15235882.2018.1545504
Hewings-Martin, Y. (2017, October 4). Bilingualism: What happens in the brain? Medical News Today. https://www.medicalnewstoday.com/articles/319642
Koike, D. A., & Klee, C. A. (2013). Lingüística aplicada: Adquisición del español como segunda lengua (2nd edition). Wiley.
Zentella, A. C. (1998). How to raise a bilingual child cómo criar … – Kim Potowski. http://www.potowski.org/sites/potowski.org/files/media/Zentella_manual_0.pdf
37 comments
Aneesa Zubair
¡Hola Ana Lucía! Me gusta mucho como aclaras los mitos sobre el bilingüismo y ofreces algunos pasos para las personas que quieren criar a niños bilingües. Aunque no hay un fórmula perfecto, me gusta como sugieres que los padres ofrecen muchas oportunidades variadas de encontrar los dos lenguajes—como escuchar la música, hablar, or leer. El proceso de adquirir una idioma es tan interesante (¡y realmente bien espectacular!).
Mariana Mata
¡Hola Ana Lucia! ¡Excelente articulo! La importancia del bilingüismo ha crecido tremendamente en los últimos años y sé que muchos padres se mortifican con la inmensa presión de que no hay cierta manera de educarlos/las con las dos lenguas. A mí me parece más útil que los padres hablen su propio idioma con su bebe. De esta menara, él bebe puede desarrollar su cognitiva en una manera extremadamente rápida y así, tiene menos posibilidad de perder la lengua fácilmente.
Justine Ruiz
Hola! ¡Me gusta mucho leer su artículo! Es una locura darse cuenta de que en ese entonces, ser bilingüe estaba mal visto, pero ahora convertirse en trilingüe es increíble. El mundo definitivamente evoluciona con los años. Podía entender lo difícil que es criar niños con el conocimiento de varios idiomas. Mi madre dejó de enseñarme español a una edad temprana porque yo no podía entender nada. Jajaj!
Kristina Heerdegen
¡Hola Ana! Creo que fue muy interesante cómo hablaste sobre la idea de criar niños bilingües y cuántas personas piensan que les causará problemas a los niños en el futuro. Lo que es tan interesante es que en realidad está fortaleciendo sus mentes y preparándolos para poder hacer conexiones y también aumentar la productividad del cerebro.
Lyzette Flores
!Hola Ana muy buen artículo! Las oraciones en tu primer párrafo me recordaron una película que uno de mis profesores de psicología nos hizo ver. Implicaba que los Chicanos de los años 60 y 80s fueran castigados por hablar español. Me alegro de que este país haya progresado de alguna manera para el mejor. Saber “spanglish” es genial ya que podemos pasar de un idioma a otro inconscientemente. ¡Somos geniales!
Cassandra Cardenas-Torres
Como una persona de casa bilingüe creyendo mis padres siempre mi han dicho que ser bilingüe es lo mejor de lo mejor para cuando entre a trabajar. Y pienso que ahora muchos tienen que aprender otro lenguaje para poder tener un trabajo mejor. Opino que es muy interesante como ser bilingüe era algo negativo y ahora es lo opuesto.
Sophia Solis
¡Hola, Ana Lucía! Tu artículo trajo a colación algunos puntos muy interesantes. Estaba feliz que mencionaras que cada niño tienen su propio manera de aprender un segundo idioma. Debe hacer maneras de ayudar a todos los estudiantes en el desarrollo de su segundo idioma, y una, por ejemplo, puede ser hacer que los estudiantes colaboren entre sí. Ya que hay unos niños que conocen bastante bien el segundo idioma, definitivamente pueden ayudar a los que no están tan avanzados. Aunque toma mucho tiempo, cosas simple como se pueden hacer un impacto en el aprendizaje y hablando de el idioma.
Madeline Emke
¡Este es un artículo asombroso! Como hablante no nativo, es muy interesante y útil leer sobre maneras de aprender un nuevo idioma. Me gustó cómo el artículo se centra en criar niños bilingües, pero también me despierta curiosidad si las técnicas para criar niños bilingües también podrían aplicarse al aprendizaje de un segundo idioma? En general, un artículo muy interesante e informativo que me impulsa a aprender más.
Meghann Peace
¡Creo que sí pueden aplicarse al contexto de la adquisición de segunda lengua! Nunca van a tener el mismo efecto, ya que todos los niños que aprenden un idioma lo aprenden a la perfección, pero este no es el caso para todos los adultos. Sin embargo, lo importante para la adquisición de segunda lengua es que se intente todo. Puede que para una persona funcione la escritura, mientras que para otra funcione mejor escuchar la música. Pero será mejor con una variedad de exposición, entonces ¿para qué no intentar usar esas mismas técnicas?
Sonora Mata
Hola Ana Lucía, este artículo es muy buen escrito y me gustó mucho. Espero criar a mis futuros hijos en una casa bilingue. Es una de las razones por que estoy tomando muchas clases de espanol ahora. En el artículo hay muchas buenas recomendaciones como libros y musica en dos idiomas. ¿Tal vez películas son otra buena opción?
Katarina Garza
¡Hola, Ana Lucía! Disfruté leyendo tu artículo. Principalmente las partes sobre la actitud y el trato de los bilingües en el pasado versus ahora. Cuando mis abuelos eran niños, eran bilingües, pero sus padres les dijeron que no enseñaran español a sus hijos porque la gente los miraría con desdén. Así que no lo hicieron. Ahora, mi hermanito y yo estamos siendo presionados para aprender español porque es muy recomendable. Es muy interesante.